Los nombres de los autores del Himno a la Arquidiócesis de Cuenca, se dio a conocer públicamente, durante la Eucaristía por los 250 Años de Fundación de la Diócesis de Cuenca, en el Estadio Alejandro Serrano Aguilar.
Al cumplirse los 250 Años de la fundación de la Diócesis de Cuenca, se convocó públicamente a los Autores y Compositores del Azuay, para crear el himno de la Arquidiócesis de Cuenca y luego de la selección, el jurado calificador, designó al Padre JOSÉ BOLÍVAR JIMÉNEZ ALVAREZ, como autor de la letra, y al Músico CELSO HONORIO OCHOA PATIÑO, como creador de la música.
José Jiménez, nació el 28 de junio de 1954, en Cuenca-Ecuador. Ha publicado varias obras de carácter teológico, jurídico, histórico y pastoral. En la Universidad del Azuay en 1997, publicó dos ediciones de la serie “Textos Universitarios”: 1) Pistas para el Estudio de la Historia de la Iglesia Antigua y 2) Apuntes sobre Doctrina Social de la Iglesia. Además es autor de la letra del himno de la parroquia Ludo y Chiquintad.
Ejerce la docencia en el Seminario Mayor San León Magno, Intepal, Universidad del Azuay y profesor invitado de la Universidad Politécnica salesiana. Es Director de la Escuela para el Diaconado Permanente;
Vicario Judicial de la Arquidiócesis de Cuenca (1999 al 2015); Vicario Episcopal (2003 – 2007); Ex - Director de la página de la Iglesia en el Diario El Mercurio y colaborador de las revistas: “Sin Fronteras” de Colombia y “Ser Familia” de Ecuador.
Celso Ochoa, nacido en el Cantón Nabón-Azuay, el 11 de marzo de 1938. Se especializó en piano y contrabajo en el Conservatorio José María Rodríguez y como profesor normalista en el “Instituto Superior Ricardo Márquez Tapia”, -actual UDA- y luego de un curso de musicología de 4 años.
Se desempeña hace 20 años como profesor de música y director de la banda de guerra de la escuela “Luis Cordero”. Formó parte de prestigiosos conjuntos musicales como el “Trío Cuerdas y Guitarras del Austro”, “La Estudiantina Atenas” y “El Quinteto de Cuerdas Románticas”, con los que ha grabado varios discos. Personalmente grabó, con inusitado éxito, un hermoso pasacalle titulado “Gualaceña, flor del alma”. Además en varias oportunidades formó parte de la Orquesta Sinfónica de Cuenca.
Es autor de varias composiciones como el pasillo “Llegaste a mí”, el pasillo “Recompensas”; el albazo “Vamos a la fiesta”; el pasillo “A mi gran ciudad”, entre otras distinciones.
